El otro día vi en el blog de Dondado un meme bastante atractivo que me llamó la atención, y me dije: «¿por qué no lo hago?». Siempre ha entrado en conflicto la temática de Aletreando y todo el sistema de promociones virales que acaban poblando las bitácoras pero, aunque quisiera negarlo, hay algunos que son atractivos. Como el meme que paso a hacer a continuación: «A través del tiempo». Toni, enemigo también de este tipo de entradas, ha hecho su versión.

Hace 10 años. Yo hacía poco que trabajaba como mecánico industrial en un pequeño taller y con mi novia, con dos años de noviazgo, nos decidimos a comprar nuestro coche: un fantástico Seat Ibiza TDI que, aún hoy, sigue funcionando como el primer día. Los planes de futuro comenzaban a ser presentes y, con 21 años, la vida daba sus primeros golpes.
Hace 5 años. Después de estar cuatro años de alquiler nos decidimos por la compra de nuestra vivienda pero, para ir contracorriente (algo muy común en nosotros), optamos por una casa con terreno. Así que, con 26 años, era propietario de una torre (o chalet) de tres plantas con un jardín de 1000 metros cuadrados. No podíamos imaginar todo el trabajo que da eso (y los 40 años que nos atamos con el banco).
Hace 2 años. Mi hijo tenía casi un año de edad y con él había cambiado totalmente nuestra vida. Un año de casado y la casa se había revolucionado con los pañales, los bodies las cremas y los primeros destrozos de un niño demasiado activo como para retenerlo entre cuatro paredes. Detalles sin importancia ante la maravilla que supone el ser padres.
Hace 1 año. Cumplía mi primer año blogueando y con el aniversario también se cumplía uno de mis sueños: escribir con asiduidad. Siempre he sido demasiado vago para ponerme con tareas intelectuales si tenía algo más ligero por hacer pero, gracias a todos los que leéis este blog, he conseguido sacar ganas para estar creando continuamente (casi las 24 horas). Roger (mi hijo) entró en la guardería siendo el principio de su larga etapa lectiva. Y el inicio también de su independencia que, lo queramos o no, acabará sucediendo.

Y ahora, como dice Dondado, a hacerse pasar por futurólogo (tiembla Rappel). ¿Qué puede pasar en el futuro?

Dentro de 1 año. Los cambios no suceden en tan poco tiempo pero creo que por fin podré mantener una conversación lógica con mi hijo, quizá haya cambiado de trabajo (espero que para mejor) y, seguramente, tendré algo más de tiempo para dedicarlo a la escritura. O a sentarme a hacer el vago frente al ordenador.
Dentro de 2 años. Habré cambiado de moto apostando por una 600 (creo que una CBR) habiéndome sacado también el carnet de coche (prometido). El banco nos dará un respiro y no tendremos que dedicarle tanto porcentaje del salario por lo que también nos permitiremos más caprichos. Entre ellos el viaje a Japón que está eternamente en espera.
Dentro de 5 años. Uf. Esto sí que es difícil… Seguramente haya decidido tomarme más en serio las letras apostando por una especialización académica o algo por el estilo. Habré acumulado la suficiente experiencia como para acometer una novela (también eternamente en espera) y, quizá, tendré el suficiente valor como para moverla. Roger tendrá 8 años por lo que será bastante autónomo e independiente. ¿Más tiempo para nosotros? ¡Sí! Aunque echaremos de menos la etapa anterior…
Dentro de 10 años. Tendré 41… Ese cuatro de delante pesa bastante como para decirlo alegremente a la edad que tengo ahora. Y, para colmo, nuestro hijo será adolescente. Me prepararé para las discusiones, las salidas nocturnas, la vergüenza de estar con sus padres… Todavía recuerdo mi etapa con trece años y no le culparé de sus manías. Quince años amortizados de hipoteca y ya solo quedan treinta y cinco. Puede que sea un buen momento para cambiar de casa y amortizar el crédito. ¿Valdrá la pena vender en ese futuro? Ya se verá.

Bueno. Es una buena reflexión sobre lo vivido. Y esa era la finalidad de este meme. ¿Alguien se anima a hacerlo?