El fuerte de cartón – Relato.
-¿Cuál es la última novedad, sargento?
-Todo tranquilo, mi general. No hay indios a la vista.
-Perfecto. Si ve algo extraño no dude en avisarme.
El sargento dio varias vueltas por lo alto de la empalizada sin advertir nada anormal en ella. Los troncos permanecían tan prietos como el primer día que los levantaron, alrededor de la única fuente que había en muchas millas a la redonda. «Tuvimos suerte», pensó oteando el horizonte. «No quiero ni pensar que pasaría si no hubiéramos encontrado la materia prima para el fuerte. Ni el séptimo de caballería podría salvarnos de los…».
-¡Mi general! ¡Los indios!
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-¡Manolito! ¡Sal de una vez de ahí!
El niño permanecía en silencio dentro de aquella gigantesca caja de cartón mientras su madre, a punto de perder la paciencia, se aproximaba a grandes pasos desde la cocina.
-¡Manolito! -siguió gritando en vano-. ¡O sales de la caja o te llevo a rastras a la mesa!
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-Mi general, ¿qué es eso?
-No tengo ni idea.
-Parece… Una especie de tótem.
-¿Tan grande? Tiene forma de mujer.
-Eso creo yo también. Pero, ¿no le parece extraño que los indios hayan venido hasta aquí sólo para traer esa figura?
-Y tanto que me lo parece, sargento. Pero podría tratarse de una ofrenda de paz. Deberíamos meterla en el fuerte.
-¿Usted cree? Me temo que es una trampa. Recuerde lo que pasó en Troya…
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-Se acabó. Ahora mismo te saco de ahí. Ya sabía yo que no debía dejarte la caja de cartón vacía del frigorífico. A partir de ahora jugarás con juguetes, como los niños normales. ¡Y no te resistas! ¡Yo no soy ningún indio!
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-¿Qué cree que van a hacer con nosotros, mi general?
-Seguramente nos arrancarán la cabellera. O, quizá, algo peor.
-¿Ve? Ya le dije que era una trampa.
-Lo siento, no pude resistirme.
-¿Y eso?
-El tótem… Se parecía tanto a mi madre…
Comentarios
7 comentarios
Jajaja, eso es algo que pasa muchas veces que a los niños les regalan miles de juguetes demasiado obvios y ellos se lo pasan mejor con los que dejan volar su imaginación.
La última entrada de Lucía cuando publicaba el comentario: NUEVO ÁLBUM DE LOS FRANZ FERDINAND PARA ENERO
Precioso relato y muy imaginativo. Me ha gustado.
Los niños y su mundo son un tema apasionante ¿verdad?
Un abrazo,
Esteban
La última entrada de Esteban cuando publicaba el comentario: DAVID y GOLIATH
Genial, me ha encantado.
Es que los niños pueden ser felices con cualquier cosa, lo malo es que cada día les dejamos menos sitio a la imaginación.
Un beso
La última entrada de lupe cuando publicaba el comentario: HANNAH JONES
Que bueno,es que los niños nos utilizan siempre para todos sus juegos,jajaja
Un beso
Isa
La última entrada de Isa cuando publicaba el comentario: ¿QUIEN DICE QUE HAY CRISIS?
Una vez trajo mi padre varias cajas de cartón gigantes a casa, de lavadoras y neveras (y más grandes que me parecían por ser cría) y con montó un castillo, creo que nunca me lo pasé tan bien.
La última entrada de Capitana cuando publicaba el comentario: Espíritu
A veces deberíamos pensar un poquito como ellos….
Nada de tantos aparatuchos electrónicos y más cajetas de cartón y pelotas que es lo que realmente les va a hacer crecer de una manera sana y feliz….
Por cierto, genial el relato..
Un beso.
La última entrada de neruda cuando publicaba el comentario: El "afilaor"….
Y tanto, Lucía.Sobre todo con las cajas grandes. Para mí que llos jugueteros atraen más con el colorido de los envoltorios que con el contenido en sí.
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