Años en verso.
Uno, dos, tres años…
Te he visto desde el primer día
y tengo la sensación
de que hoy sea el segundo.
Arrullos, besos, caricias…
Tantas sensaciones transmitidas
y una sola palabra
capaz de resumirlas:
amor.
¿Qué sería de los días
sin una travesura tuya?
Una sucesión de minutos
sin ningún sentido
ni importancia.
Te conozco desde hace tres años;
tú, desde siempre.
Toda una vida para ambos,
tan nueva y excitante,
que sólo deseo
que pasen los días
para tener el placer
de vivirlos contigo…
9 comentarios
Comentarios
9 comentarios
sencillamente, hermosa!
Qué bonito cuando tu niño lea estas cosas cuando sea algo más mayor …
Probando una cosa …
Vale no, no se publica la última entrada del blog ni con la casilla marcada ni desmarcada … Qué has quitado el plugin??
Borra estos comentarios si eso, que no pegan demasiado en una entrada tan dulce, perdona.
Gracias, Carla Mariela. La musa en sí ya es muy buena… 🙂
Hecho…
Qué bonito, esta va dedicada a tu niño, cuando crezca un poco y le puedas enseñas las cosas que has escrito para él y la ternura con la que las escribes, se va a emocionar, estoy segura.
Puf. No sé yo si aguantaremos hablando de estas cosas, Capitana. Creo que la timidez también se hereda. 🙂
Es precioso Iván…me emociona tanto que no quiero ni pensar en lo que sería leerlo si estuviese escrito para mi.
Sobre lo que has escrito antes decirte que a veces una mirada vale más que mil palabras, tú deja que tu hijo los lea y que te transmita lo que quiera, como quiera.
Muaa
La última entrada de Bela cuando publicaba el comentario: Buenafuente, que me se me ha cortao!
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